Tuesday, April 25, 2006


Te arrullo otra vez;
es primavera de manos veloces.
Un tropiezo bifurca
caminos andados en retroactivo;
tengo saliva suficiente
para regalarte un naufragio.
Tu camisa blanca envuelve mi corazon de pollo
y los dentros para el caldo
de ruinas.

1 Comments:

Blogger Elizabeth Sobarzo said...

Y la primavera no deja de agitar el caldero de sus piernas

9:12 PM  

Post a Comment

<< Home